Explorar el Parque Nacional Volcán Isluga es adentrarse en un paisaje altiplánico fascinante, donde los senderos cruzan bofedales, lagunas cristalinas y pueblos aymaras que conservan tradiciones ancestrales.

Entre sus principales atractivos se encuentran la Laguna Arabilla, los géiseres de Puchuldiza y el imponente Volcán Isluga, que domina el horizonte con más de 5.500 metros de altura.

Los miradores naturales permiten apreciar el contraste entre las montañas nevadas, los valles desérticos y la vida silvestre que habita en este entorno extremo: vicuñas, flamencos y suris que se mueven con armonía bajo un cielo de azul profundo.

Su vegetación, dominada por queñoas, llaretas y tolas, sobrevive en condiciones únicas, adaptada al clima seco y a la gran altitud. La mejor época para visitarlo es entre abril y noviembre, cuando el clima es más estable y los caminos permanecen habilitados.

El Parque Nacional Volcán Isluga te sorprenderá con su biodiversidad, su energía ancestral y la conexión profunda que se siente con la cultura aymara y el silencio majestuoso del altiplano chileno.

Miradores naturales permiten apreciar el contraste entre la Selva valdiviana que se extiende por esta zona de la isla, el océano Pacífico y sus humedales.

Destaca su vegetación siempreverde, con Tepas, Coigües y Arrayanes cubiertos de musgos, que crean un ambiente fresco, único y lleno de vida. El verano es la mejor época para visitarlo. Te sorprenderá con su biodiversidad, su clima templado lluvioso y esa atmósfera verde intensa que lo envuelve todo.